Por la Fiesta del Citron en Gaiman, el Instituto Nacional de Semillas comenzó a estudiar el fruto

El director de Producción e Industria de la Municipalidad de Gaiman, Leonardo Tapia, acompañó a Juan Cruz Acosta García, referente del Instituto Nacional de Semillas (INASE), organismo que lo envió a la zona con el objetivo de estudiar las características del citron.

Tapia destacó que Acosta García llegó a Gaiman en virtud de que desde el INASE mostraron interés en el fruto a raíz de la celebración de la Fiesta del Citron, que el último fin de semana, con gran convocatoria, tuvo su segunda edición presencial, y la tercera desde que surgió la celebración. 

“Desde el INASE quieren estudiar la semilla, cómo se podría comercializar, qué propiedades tiene y darle un registro porque la verdad es que no existe un registro certero para saber de dónde proviene”, comentó Tapia.

“Si bien el ingeniero agrónomo Ricardo Irianni -presidente de la Sociedad Rural Valle del Chubut- ha hecho algunos estudios, solo sabemos que hay en Estados Unidos y en África”, agregó. 

En este contexto, Tapia y Acosta García -que se desempeña en la oficina que el organismo nacional tiene en Esquel- recorrieron chacras en las que hay citron sembrado, y de donde se llevó muestras de semilla y del fruto, además de partes de plantas y otros elementos para avanzar en el estudio.

Tapia comentó además que desde que se comenzó a realizar la Fiesta del Citron, el área que encabeza, a través del Vivero Municipal, elabora plantines de citron para entregar a los productores, con destino principalmente a la producción de dulces. 

“Extraemos las semillas de la fábrica municipal de dulces y conservas Delicatessen cuando los procesamos y después las llevamos al Vivero, donde el personal hace los plantines. Llegamos a hacer 5.000 hasta el momento”, indicó el funcionario municipal. 

El citron es una especie de sandía redonda que proviene del desierto de Kalahari, en África, y las primeras semillas llegaron al Valle Inferior del Río Chubut de la mano de colonos galeses provenientes de Estados Unidos hace más de 100 años.

Si bien en una primera instancia se utilizó para la elaboración de mermeladas y dulces artesanales, año a año aumenta la producción y se incorpora de manera paulatina en el mundo culinario a través de recetas.